tengo la flor de la ironía en la punta de la lengua
me molesta para besar y conversar
para reír, llorar, y hasta para confiar
trato de envenenarla, pero la muy porfiada no mengua
Dijo una vez un mono sabio
como lo son todos los monos:
"si la corto, vuelve a crecer"
ante tal argumento, renuncio a las rosas
solo cultivaré la flor de mi lengua
y alguna otra para dormirla
cuando quiera que sobren las risas
Me encanta como me haces sentir.( incluso al escribir )
ResponderEliminar